viernes, 30 de octubre de 2009

ITÈLÓDÙ IFÁ ( Iniciación de Ifá)

A través de la iniciación de Ifá una persona busca ayuda para tener consecuencias positivas en su vida. La iniciación, además, ayuda a evitar todo tipo de tribulaciones que puedan afectar la vida de una persona. Es una forma de encontrar la estabilidad y todo tipo de suerte. Mediante la iniciación de Ifá una persona puede modificar su Orí (destino) para que sea favorable. Si una persona quiere reparar situaciones con el poder de Ifá esta podrá tener tranquilidad en los resultados y sus soluciones.
Antes de la iniciación, existen unos pasos previos que es necesario dar para asegurar el éxito de la misma y de la forma de vida que adoptaremos. El primero de ellos es el estudio. Como se manifiesta en el Odù de Òsá méjì, tenemos que pensar en la sabiduría que necesitamos para sobrepasar los obstáculos, así como en los estudios que debemos asumir como una forma de vida, ya que eso nos permitirá estar a gusto con nuestra iniciación en las circunstancias posteriores.
Para el proceso de iniciación uno de los elementos claves es el sacerdote de Ifá que la realiza. Este Babalawo debe ser una persona honesta y verídica en su conocimiento y en la preparación de la ceremonia de iniciación. Como se evidencia en Íká fún (los mandamientos de Ifá) para un Awo Òrúnmìlà es tabú iniciar a una persona en Ifá o realizar cualquier ceremonia sin tener el conocimiento básico.
Si el sacerdote es honesto y verídico no debe tener ningún reparo en informar a la persona que desea iniciarse acerca de la compensación (derecho) que deberá pagar por la ceremonia. Así, la persona podrá tomar una decisión basada en la información de las diferentes actividades que el sacerdote realizará durante la iniciación. Esto traerá el éxito a los sacerdotes y a los nuevos iniciados.
Un paso importante en proceso de iniciación es el sacrificio. Como se indica en el Odù de Ogbè Ìrosùn, “El sacrificio (Ẹbọ) es la forma que usamos para sobrevivir, el sacrificio se ha convertido en nuestra forma de vida”. Es decir, el primer paso es limpiar a la persona, purificarla a través del Ẹbọ para que este acta para la iniciación.
Sacrificios previos como los del Odù de Owo Ifá kan son importantes para la transformación del destino de la persona. También es importante la propiciación al Òrìşà de la persona; aunque los Yorùbá no requieren la iniciación del Òrìşà antes de la iniciación de Ifá, sin embargo nosotros recomendamos esa iniciación previa y la propiciación a Èşù Òdàrà así como también a Orí (destino).
Èşù Òdàrà (El encargado de llevar el sacrificio al cielo) tiene la capacidad de canalizar toda la iniciación, así como ayudar a la propiciación del Orí (cabeza) de la persona evitando cualquier actividad causada por los Ajogun (entidades negativas o malévolas). Es necesario que Orí (destino) sea propiciado adecuadamente como factor importante en la iniciación al igual que el Orí de los progenitores del iniciado.
En el proceso de una iniciación las personas continuarán recibiendo un Odù proviniendo de Ifá a la tierra para su transfiguración, para que pueda conseguir una buena condición que cambie su vida positivamente, los nuevos sacerdotes de Ifá requerirán realizar nuevos sacrificios.
La forma que usamos para iniciar es una costumbre basada en la búsqueda de retomar los conocimientos de buena fuente, para tener una base de conocimiento y tratar de retomar el işeşe (tradicionalismo) Yorùbá.
Luego de estos pasos previos, el iniciado pasa al Bosque de Ifá. Esta ceremonia solo puede ser vista por los iniciados y los sacerdotes que están llevando a cabo la ceremonia. El bosque de Ifá representa el nacimiento de un Bàbálàwo. En esta ceremonia se propician únicamente a Òrúnmìlà y a Odù.
Odù, esposa de Òrúnmìlà, es la única deidad que solo puede ser vista por un Bàbálàwo, y es por ello que esta parte de la iniciación no puede ser observada por nadie más.
Ipẹşẹ (propiciaciones) y ẹbọ (sacrificios) posteriores a la iniciación, son dos factores importantes para un nuevo Awo Òrúnmìlà, ya que Ifá ha determinado un nuevo signo que cambiará su destino. Como consecuencia la persona tiene que hacer los sacrificios correspondientes para vencer las turbulencias de una nueva vida. Es por ello que es importante el conocimiento del Bàbáláwo que inicia a la persona para poder aplicar los eses Ifá (versos de Ifá), encantamientos necesarios para que la persona pueda ver materializado resultados positivos y que Ifá los pueda seguir multiplicando.

Òrúnmìlà

Ifá es el nombre de Òrúnmìlà en el cielo. Para los Yorùbá, Ifá es todo lo que está entre el cielo y la tierra, es decir, todo en la vida. Ifá es un oráculo a través del cual se conoce el destino de las personas que con él se consultan, y este oráculo es descifrado por los Bàbáláwo.
Es el dios de la adivinación y se le conoce por varios nombres: Òrúnmìlà, Ifá, Èlà, Èlàisodé, Àgbọnnìrègún, Akéréfinúogbón. Es conocido como la única persona que ha estado en presencia de Olódùmarè (dios) por largo tiempo y logró adquirir una gran sabiduría sobre la vida. Según la leyenda, Òrúnmìlà se asentó en la ciudad de Ife, en un lugar conocido por Oké igetí, donde vivió por muchos años. También se dice que vivió en la ciudad de Ewi. Tuvo siete hijos, y entre estos y los sacerdotes iniciados tuvo dieciséis Oba (reyes de Ifá), mejor conocidos como los dieciséis mejí de Ifá. Abandonó la ciudad de Ife para pasar sus últimos años en Adó; de hecho, en la cultura Yorùbá hay una frase que dice “Adó nilé Ifá” (“Adó es la casa de Ifá”). Òrúnmìlà es el mayor intérprete de la sabiduría del oráculo de Ifá, de los cantos poéticos, así como de pasajes que han contribuido por más de mil años a la salvación del destino de muchas personas en el mundo. Su poder y conocimiento han permitido desde la instauración de reinados hasta conocer todos sobre los aspectos para mejorar la vida. En sus ritos ceremoniales se le conoce como el que aprende todos los idiomas, el que trae la pacificación o reconciliación, hombre poderoso que sopla el tronco del elefante y el que pelea con la muerte para salvar a sus hijos. Dentro del culto Yorùbá, la reverencia es un factor de gran importancia. Esta debe ser honesta y verdadera hacia los ancestros, Olódùmarè, Ifá, los verdaderos principios de la fe. Un ejemplo de fe y reverencia es saludar a Ifá en la mañana por los sacerdotes de Ifá, de la misma manera que la tórtola saluda a Ifá todas las mañanas para pedirle que intervenga en su vida. Òrúnmìlà protege a sus hijos de todo daño y maldad. Ifá advierte que mientras más daño le hacen a un hijo de Òrúnmìlà, este hijo se embellece y todo lo malo se convertirá en bueno, pero no podrá despreciar o hablar mal de las personas y tendrá que ser honesto y sincero en Ifá y en su vida, es decir, tener un buen comportamiento. El Odu de Ogbè Oşe habla sobre las circunstancias en que se puede encontrar un persona, como fue el caso de los tres pájaros devotos a Ifá: turako azul, turako rojo y el loro africano (Yaco de cola roja) los cuales estaban siendo atacados por la maldad y siguieron las diferentes recomendaciones de Ifá y toda la maldad que recibieron se convirtió en bien y Ifá los embelleció y fueron prósperos. Òrúnmìlà, en cada adivinación, resalta la importancia de hacer sacrificio y entender las recomendaciones para una buena Iwa (carácter) como forma de vida. También habla de la importancia de los tabú que Ifá impone, ya que el incumplimiento de los mandamientos Ìká Fún o de las prohibiciones del signo de Ifá, provocarán que Òrúnmìlà retire su apoyo a las personas, incluso siendo sacerdotes de Ifá. Propiciación de Òrúnmìlà Existen diferentes tipos de propiciaciones, algunas conocidas, como es el caso del Obì àbàtà (nuez de cola): Oriki Obì Moloriki awo ile onírikí Moloriyo awo ode Imanleyo Molofi Obì kan korongbogbo korongbogbo Fún awo ile onikeu Akokí adaba tinfo rakinrakin lorú Enito fún ìkín lobí bi arowọ jéun Jeun jéun bi arowæ jeun Enito funki lobì bi arowọ séungbogbo Séungbogbo séungbogbo bí arowọséun Traducción: El que merece saludarlo el sacerdote de Onírikí El que merece regocijar con él, el sacerdote de Imanleyo El que merece darle un Obì grande Sacerdote de Ónique. Tórtola vuela arriba de la montaña El que da Obì a Ifá tendrá algo de comer Algo de comer algo de comer tendrá algo de comer El que da Obì a Ifá tendrá dinero para todo Para hacer todo para hacer todo tendrá dinero para hacer todo Es esto un verso común entre los sacerdotes tradicionales Yorùbá a Ifá para prosperar. Otros ingredientes importantes para la propiciación son eku (ratón), eja (pescado mensajero), ekeri (maíz tostado). Se ruega la cabeza de Alara con el ratón Se ruega la cabeza de Awunjaale con pescado grande Se llama para la ayuda El que llama por la ayuda se salva El que no llama para la ayuda y no acepta su ignorancia no se salva Hicieron adivinación para Òrúnmìlà Ifá salvará a Alado Ewi con las casas, con todas sus esposas y sus hijos Ha venido el salvador Ifá si yo puedo ver a un buen sacerdote para salvarme. Los Yorùbá para la riqueza y la prosperidad también utilizan ingredientes como: Emu (vino de palma) bebida para la riqueza; Orógbó (cola amargo) usado para la manifestación de la suerte y contrarrestar el mal; Obì àbàtà (kola rojo) es un ingrediente de poder y éxito sobre toda situaciones. Para la propiciación es muy importante el uso de instrumentos especiales que emitan algún tipo de sonido como son: Sèkèrè (calabaza con el aro del que cuelgan caracoles) es símbolo de riqueza y unión familiar. Agogo Ifá (campana de Ifá) su sonido es el canto de victoria y apoyo a los seguidores de Ifá. Òrùka Òjé (campanas de Obàtálá) se usa para apaciguar los Òrìşàs y llamar por paz. Àdà Òrìşà (machete de los Òrìşàs) es el símbolo de la espada de todas las deidades entregada por Obàtálá a Òrúnmìlà para destruir a las aje (brujas) y destruir los enemigo. Ìrosùn Ìwòrì La buena sabiduría de Ifá es completamente adecuada para gobernar el mundo, El poder interior de su conocimiento provocaría el bien en la humanidad. Òrúnmìlà a gbe wa, Aşe! (Òrúnmìlà nos salve, Así sea!).

Egungun Ancestros


Son los espíritus ancestrales. Todas aquellas personas que ya murieron y que tuvieron con una persona algún vínculo religioso o familiar en vida.
Los Yorùbá consideran fundamental la reverencia a los ancestros, ya que por ellos existimos.
Para la veneración a los ancestros se utilizan cultos a diferentes Òrìşà. Uno de ellos es el culto a Orò, que es la reverencia a un espíritu de grandes poderes ancestrales. También se le rinde culto Alagemo, cuya práctica es una danza de manifestación en los festivales de Egungun en Nigeria, como símbolo de tradición. Además, se propicia a Egbe Orun Egbe Aye, la fraternidad del cielo y la tierra, que representa el mundo espiritual de todos los muertos así como familias o comunidades de cualquier territorio en el planeta. La deidad por lo general vive al pie de una mata de plátano o a la orilla de un río, y es una gran ayuda ceremonial para un Awo Òrúnmìlà, Babalòrìşà o Iyalòrìşà.
Además de los Egungun, dentro de los espíritus presentes en el culto Yorùbá encontramos los Aje Osa eleje. Son demonios o espíritus malévolos. En su definición pueden tomar varias características: Pájaros, brujas, brujos o mayores…
Nacen en el Odù de Ifá de Òsá Méjì y son entidades del mal que representan la destrucción de la humanidad. Sus actividades se basan en crear problemas, enfermedades y pobreza; además, pueden hacer pagar a un deudor o hacer salir de una deuda a cualquier persona. El único que tiene el poder para enfrentarla es Òrúnmìlà, ya que ningún otro Òrìşà pudo con las brujas. No son deidades y por lo tanto no se reciben ni se consagran.
Para ejemplificar el tipo de comportamiento que pueden tener las brujas recordamos el ataque del 9/11 en Nueva York. La adivinación anual de Ile TunTun para el año 2002-2003, realizada en Cuba y presenciada por el Awise Abaje, estaba determinada por el Odù de Òsá Méjì, en donde Ifá dice: el ataque inminente de las brujas. Pájaros que buscan la muerte de personas en masa. Esta parábola encaja con el perfil del atentado: aviones en forma de pájaros tripulados por personas que ofrecen sus vidas como sacrificio para provocar la muerte de otras personas.

Òrìşà’s Deidades

Son las deidades que se adoran en Ifá. En el culto Yorùbá existen alrededor de 600 Òrìşà. En la práctica cubana estas deidades fueron sincretizadas con santos católicos para que los esclavos Yorùbá pudieran seguir practicando su culto sin ser castigados y condenados por la Iglesia Católica.


Cada Òrìşà representa un elemento de la naturaleza, es por ello que para su propiciación, adoración o representación no se utilizan elementos químicos, sino de tipo natural. Por ejemplo, el cemento, al ser un material creado por el hombre no puede ser utilizado como material para la fabricación o la propiciación de ninguna deidad.


Los Òrìşà, como manifestación de Olódùmarè son venerados y propiciados para ayudar a resolver los problemas del día a día de las personas. Cada uno tiene una función determinada dentro del culto Yorùbá y su representación es única y diferente al resto.



De igual manera, cada Òrìşà tiene sus determinados tabús, los cuales son importantes conocer para no incurrir en violaciones de los mismos y evitar el castigo de las deidades.


Aunque no existe una jerarquización específica entre los Òrìşà, hay algunos que son más importantes para ayudar a resolver los problemas de las personas, como por ejemplo Aje (La diosa de la riqueza) que sirve para el dinero, o como Èşù que puede ayudar a conseguir diferentes tipos de suerte.





Òtúrúpòn Méjì


Dice Ifá: Ifá determinó a los seres humanos que una persona no es fructífera por su signo de Ifá, los problemas de la persona no involucran a los Òrìşà si no a la misma persona. Es por ello que debe propiciar a Orí para mejorar su destino. El sacrificio para cualquier suceso financiero tendrá que ser prioridad para asegurar su negocio o el bien económico de las personas.


Òtúrá Méjì


Dice Ifá: La persona estará recibiendo la bendición de Olódùmarè (dios) para tener los diferentes Ire (suerte) en la vida. Es importante la dedicación en Ifá y el buen comportamiento familiar para mantener una vida de tranquilidad. La constancia en Ifá será contribuida por Òrúnmìlà para la vida de la persona y su familia.

Ìrètè Méjì


Dice Ifá: Toda persona deberá iniciarse en Ifá para poder realizar sacrificios que le permitan crear en su vida una edificación de éxitos que llega al cielo, con toda persona que lo siga o comparta en su vida. Ifá tiene un reinado para la persona y podrá llega a tomar una posición importante en la vida.


Ọşẹ Méjì

Dice Ifá: Òrúnmìlà tiene el poder de vencer los enemigos en el cielo y en la tierra. La persona estará recibiendo de Òrúnmìlà una protección especial y garantizándole la suerte en la vida. El Awo Ifá tendrá que dar grande pasos para obtener la prosperidad.


Òfún Méjì o Orangun Méjì

Dice Ifá: El sacrificar a los ancestros Ooni Yorùbá para conseguir un apoyo. La iniciación de los nuevos Awo estará supervisada por Odù y diferentes sacrificios tendrán que ser realizados para una manifestación del Ire (suerte). Debe usar agua fresca como material en los sacrificios.





Òtúrúpòn Méjì


Dice Ifá: Ifá determinó a los seres humanos que una persona no es fructífera por su signo de Ifá, los problemas de la persona no involucran a los Òrìşà si no a la misma persona. Es por ello que debe propiciar a Orí para mejorar su destino. El sacrificio para cualquier suceso financiero tendrá que ser prioridad para asegurar su negocio o el bien económico de las personas.


Òtúrá Méjì


Dice Ifá: La persona estará recibiendo la bendición de Olódùmarè (dios) para tener los diferentes Ire (suerte) en la vida. Es importante la dedicación en Ifá y el buen comportamiento familiar para mantener una vida de tranquilidad. La constancia en Ifá será contribuida por Òrúnmìlà para la vida de la persona y su familia.

Ìrètè Méjì


Dice Ifá: Toda persona deberá iniciarse en Ifá para poder realizar sacrificios que le permitan crear en su vida una edificación de éxitos que llega al cielo, con toda persona que lo siga o comparta en su vida. Ifá tiene un reinado para la persona y podrá llega a tomar una posición importante en la vida.


Ọşẹ Méjì

Dice Ifá: Òrúnmìlà tiene el poder de vencer los enemigos en el cielo y en la tierra. La persona estará recibiendo de Òrúnmìlà una protección especial y garantizándole la suerte en la vida. El Awo Ifá tendrá que dar grande pasos para obtener la prosperidad.


Òfún Méjì o Orangun Méjì

Dice Ifá: El sacrificar a los ancestros Ooni Yorùbá para conseguir un apoyo. La iniciación de los nuevos Awo estará supervisada por Odù y diferentes sacrificios tendrán que ser realizados para una manifestación del Ire (suerte). Debe usar agua fresca como material en los sacrificios.





Ọbàrà Méjì

Dice Ifá: Procesos de transformación en la salud de la persona estarán siendo manifestadas y Şàngó transformará las cosas positivamente. La persona y su familia estarán recibiendo apoyo de los 16 méjì para una evolución financiera. Es importante el considerar consagrar a la persona en Şàngó.



Ọkànràn Méjì


Dice Ifá: La determinación de propiciar e iniciar a la persona en Oya es importante para garantizarle el Ire Şegún (suerte de vencimiento) en todo lo que lo rodea, de esta manera podrá lograr una estabilidad firme. Aunque Şàngó puede ayudar a la persona es Oya más fuerte que Şàngó.


Ògúndá Méjì

Dice Ifá: La persona encontrará un apoyo en situaciones violentas en las deidades Ògún y Osoosi para resolverlo. Olódùmarè habla de la importancia del Ẹbọ (sacrificio) para cambiar el futuro inmediato del problema que está enfrentando. Ifá advierte que tendrá que hacer sacrificio a su Orí para que los sacrificios que se realizan queden aceptados.

Òsá Méjì

Dice Ifá: La persona es la portadora del Aşé cuando fue enviado a la tierra a través de Odù. La persona tendrá que realizar ofrendas a los mayores o las brujas (Aje) constantemente. Ifá determina que cualquier persona que se enfrente a usted estará enfrentando a Şàngó, será destruido con las 200 piedras y Şàngó estará venando sus enemigos. Ifá determina que no puede haber una felicidad completa sin el sacrificio constante a Èşù.

Ìká Méjì

Dice Ifá: El Ẹbọ (Sacrificio) será manifestado en el destino de la persona. Ifá habla de la importancia de ir a la herrería a realizar sacrificios para apoyo en todo lo que la persona se proponga. La persona, por lo general, no tiene una estabilidad completa en la vida ya que tiene muchos momentos de felicidad y tristeza. Tendrá que hacer sacrificio al muelle con Èşù para conseguirla. Debe propiciar a Orí constantemente.

Òyékún Méjì








Òyékún Méjì


Dice Ifá: Solo Òrúnmìlà le dará a la persona lo que desea. Ifá pondrá en su vida lo mejor. El dios de Ifá podrá vencer cualquier tipo de problema que la persona tenga. Ifá recomienda la inmediata iniciación para garantizar los logros positivos. Debe saludar a Ifá de noche, así como anochece Ifá vendrá a traerle toda la suerte.

Ìwòrì Méjì

Dice Ifá: Usted vino con un Orí de Ire (suerte) a la tierra y Òrúnmìlà continuará bendiciéndolo para que su suerte continúe. Es importante que propicie a Ajé (la diosa de la riqueza) para que le ayude en favores especiales. El éxito financiero es seguro y continuará, no podrá hacer un juicio o asistir si solo hay unas de las partes.

Òdí Méjì


Dice Ifá: habla de la adquisición del Ire ajé (suerte de riqueza) que estará manifestándose rápidamente en el camino de la persona. La propiciación a Orí de la persona será necesaria para mantener la estabilidad y poder sobrellevar las obstrucciones que se le presentan, Yemoja contribuirá ayudándolo con la mejora económica de la persona.


Ìrosùn Méjì

Dice Ifá: El centro emocional y pensante de la persona tendrá que ser repotenciado a través de sacrificios a Orí y Èşù como parte fundamental en la búsqueda de un bien económico y familiar. La persona recibe una bendición importante por el Ooni Ifẹ (Rey de Ifẹ Òrìşà viviente) y será relevante a la hora de las propiciaciones para obtener hijos y riquezas.


Òwónrín Méjì


Dice Ifá: La persona debe comportarse con sumisión perfecta, debe rendir reverencia a sus mayores para tener la bendición en sus sacrificios a las deidades. La persona está rodeada de enemigos pero, como quiera que sea, él los vencerá y los sobrepasará. Debe propiciar a Orí para obtener la suerte; la persona debe ocuparse de los problemas de la casa antes de resolver los problemas de los demás. Tendrá 2 suertes muy grandes, debe dar comida a Ifá. Las palabras de sus enemigos no le podrán traer ningún efecto negativo en su contra.

Ojú Odù Mérìndínlógún 16 signos principales


Èjì Ogbè



Dice Ifá: La felicidad de la persona está en la propiciación de Orí (destino). Òrúnmìlà y Èşù como sostén en la vida. Toda presencia de poder y jerarquía estará relacionada con Ifá. El éxito financiero tendrá gran relevancia positiva derivada de Elegbara y Òrúnmìlà. La persona debe ser trabajadora, no puede ser flojo. Debe saludar a Ifá bien temprano por la mañana. Debe hacer sacrificio para vencer sus enemigos. Debe ser honesto y tener un buen carácter.

Dá’fá (Adivinacion de Ifá)


“Ifá es el nombre de Òrúnmìlà en el cielo, que es el mensajero de Olódùmarè (Dios) que vino a la tierra para reparar al mundo de todas sus calamidades. Òrúnmìlà trajo consigo el secreto del universo y transmitió su sabiduría, reflejados en los encantamientos que contienen la palabra de Olódùmarè. Estos pueden ser Ese Ifá o Ifáse (poemas), Orin (canciones), Ofo (encantamientos), Itan (historias), Ewure (otro tipo de encantamientos) entre otros. Estos encantamientos, poemas, canciones…, son usados por los Bàbáláwo, es decir, los sacerdotes de Ifá, para cambiar el destino de las personas a través de la sabiduría de Olódùmarè, expresada en Ifá”.


El oráculo de adivinación de Ifá es el método de adivinación más antiguo e importante. Los Ikin son semillas sagradas que se obtienen de la palma llamada Ope Ifá, conocida en el mundo occidental como Palma reina. Para la adivinación se utilizan 16 semillas, que deben tener en su parte superior 4 ojos o tetas, que son llamados Awirin. Sin embargo también pueden ser usados ikin con más ojos, siempre que estos sean pares ya que nunca se pueden usar ikin con ojos impares. De la misma manera, al ser semillas sagradas, estas nunca pueden ser usadas para la elaboración de aceite (Epo).

Para realizar la adivinación, además de los ikin Ifá se debe utilizar el Ìyèrosùn, que es el polvo de adivinación, el cual se coloca sobre la bandeja de Ifá, llamada Opón Ifá y sobre la cual reposa Ifá cuando no está siendo utilizado.

Otro método de adivinación es el Òpèlè Ifá. Este es un collar conformado por ocho semillas de Òpèlè, que se ubican cuatro a la derecha y cuatro a la izquierda, y que se encuentran atadas por una cadena tejida por cuentas. Existe también una cadena de bronce con ocho conchas de bronce que simbolizan las semillas y que son usadas por los sacerdotes de más alto rango en tierras Yorùbá.

Ambos métodos de adivinación están acompañados por determinantes (Ibo), que se usan para determinar el Ire (buena suerte) o el ibi o Ajogun (mala suerte).


A través de ambos métodos de adivinación se busca obtener un Odù Ifá o signo de Ifá. El oráculo de Ifá está conformado por dieciséis signos mayores o Ojú Odù Mérìndínlógún y doscientos cuarenta signos menores o Afekaleka, que surgen de las combinaciones de los dieciséis signos principales, conformando un total de doscientos cincuenta y seis Odù. Cada Odù tiene un nombre y apodos que los caracterizan y diferencian unos de otros. Por ejemplo Ogbè Méjì y su apodo que es como usualmente se conoce Èjìogbè.

Cada uno de estos Odù contienen los Ese Ifá (Poemas de Ifá), que son poemas sagrados que deben ser recitados de memoria por el sacerdote que lleva a cabo la adivinación. Se cuenta que existen alrededor de unos ochocientos Ese Ifá por cada signo.

Cada Ese Ifá trata de un aspecto concreto dentro del signo. Al definir el poema que identifica el problema del consultado se procede a realizar el sacrificio (Ebo). El sacrificio es el eje central y fundamental del dios de Ifá y de la propia religión Yorùbá. Estos sacrificios requieren unos materiales específicos, que variarán según el caso, y si por alguna razón estos materiales no pueden ser encontrados, el Ebo debe ser pospuesto hasta que estos se completen. Ifá condena de manera severa a aquellas personas que rechacen o incumplan con la ejecución del sacrificio estipulado, ya que se cree que estas personas abren el camino al ataque directo de ajegun (entidades negativas), y por esta razón no recibirán ni la ayuda ni la protección de ninguna deidad.

sábado, 17 de octubre de 2009